18/2/13

Entrevista a Ángela Becerra


"En el amor, todas las cumbres son borrascosas"

Ángela Becerra acaba de publicar "Memorias de un sinvergüenza de siete suelas", su sexta novela desde que decidiera dejar su trabajo como publicista hace trece años para dedicarse a ser contadora de historias.

Un trío de sentimientos protagoniza una historia ambientada en Sevilla, lugar dónde el "idealismo mágico" de la escritora se manifiesta haciendo el día en noche y contagiando de tanta tristeza a un sauce hasta hacerle llorar en el  parque de María Luisa. Francisco Valiente es el sinvergüenza, un sin nadie que gracias al descaro y a la estafa llega a tenerlo todo... salvo el amor verdadero, salvo a "su" Alma, su cuñada y único amor que ejemplifica la antítesis de este hermoso y famoso personaje sevillano. Morgana, la descarada y cornuda esposa de Francisco, acabará odiando a este Casanova del siglo XXI coleccionista de pavos reales como símbolo de cada mujer desvirgada de su lista de "triunfos".

Un triángulo amoroso en el que los sueños, la pasión, el odio y el erotismo son llevados al límite. Franqueza, ironía y mucho humor, en una novela contada a través de los protagonistas a modo de carrera por hacer convencer al lector que su versión sobre este "ilustrísimo sinvergüenza" es la verdadera.

Y Para conocer mejor a este "sinvergüenza", ¿qué mejor que preguntarle a Ángela Becerra?

En "Memorias de un sinvergüenza de siete sueles" el lector conoce la historia a partir del punto de vista de los tres protagonistas de una historia en la que los sentimientos tienen una fuerte presencia. ¿Cómo simplificaría a cada uno de los personajes con un sentir?
Pues mira, el que el lector conociera los puntos de vista de estos tres intensos personajes, era una de las bases de la historia. Cada punto de vista es una emoción diferente. Morgana representaría el odio y la venganza. Es un personaje muy potente que me tocó frenarla porque tenía mucha fuerza, era como un caballo desbocado. Luego Alama, con ese amor idealizado, es comprensiva, bondadosa, el exponente del amor por excelencia. Y luego está él, que con esa amalgama de contrasentidos, configura un personaje exponente de la inteligencia.

¿Qué le hizo escribir esta novela? ¿Cómo concibió la forma de narrar esta historia?
Yo venía de una novela muy cerrada, de un personaje que sufría un drama terrible llevándome a esconderme y a rumiar. Después de esto, quería hacer una novela muy luminosa, que fuera muy brillante, colorista... y entonces con esta novela he querido llevar todos los sentimientos a los extremos, como en Andalucía, dónde las luces y las sombras están muy contrastadas. Ha sido la primera vez que escribía una novela narrada en tres primeras personas y necesitaba que cada personaje tuviera mucha fuerza para que no se devoraran entre ellos. A lo largo de la novela cada personaje busca no perder el protagonismo de la historia y demostrar que su verdad es la verdadera.

Sevilla, una ciudad donde los sentidos están llevados a los máximos

“Memorias de un sinvergüenza de siete suelas” ¿cuenta con aspectos autobiográficos?
No. La historia surge de un personaje que conocí en un carnaval de Venecia con el que compartí una fiesta, aunque hay un personaje que sí existe el cual al descubrir que era un sinvergüenza me di cuenta que en este personaje había una novela brutal. El era un sinvergüenza dentro de una faceta de seductor de mujeres, pero para que este personaje alcanzara todo el cuerpo que tiene en la novela hubo otras cosas que han ido apareciendo en los diarios de "sinvergüenzas" políticos, corruptos... casos que me ayudaron a configurar este casanova del siglo XXI.

¿Es Sevilla el lugar elegido por su fervor religioso como espacio perfecto para establecer el desarrollo de esta historia "de resurrección"?
Yo quería una ciudad en la cual la magia de la historia pudiera convivir. Sevilla es una ciudad que permite esto, es una ciudad muy mágica, llena de contrastes, tradiciones, ritos. Un ciudad donde los sentidos están muy llevados a los máximos. De esta forma el escenario era perfecto, en el que los ingredientes mágicos pudieran convivir en esta ciudad sin problemas.


Es una novela en la que las citas, los refranes... tienen una gran presencia, ¿se atrevería a resumir el libre con una de ellos?
¡Uff! En este aspecto la novela contiene un homenaje velado a mi madre porque era una mujer que tenía siempre el refrán perfecto para cada momento. Para resumir esta novela no se me ocurre ninguno (risas).

"... es un libro de pasiones"

La biblia es la fuente de la que recoge una de las citas con las que Francisco describe la posición acaecida al personaje del duque de Merlot. Este sinvergüenza cita "Hay un momento para sembrar y otro para cosechar...". ¿Qué espera Ángela Becerra recoger de esta cosecha?
Pues he recogido para empezar la satisfacción de haber terminado la novela después de convivir con este sinvergüenza cuatro años y por fin dejarlo que se vaya (risas). Hay una parte que es el placer de haber escrito y sufrido durante el proceso de creación de la novela, y hay otra parte que tiene que ver con el lector, que cuando abre el libro y lo despierta completando así mi trabajo. Me gustaría que se lo leyeran y que se apasionaran tanto como yo lo hice cuando lo escribí, porque es un libro de pasiones.

¿Es en este caso el pavo real el mejor amigo del hombre?
(Risas) Dentro de la magia que te hablo, hay momentos cumbres como cuando el sauce del parque de María Luisa se contagia de la tristeza de Alma y empieza a llorar como ella. En el caso del pavo real ayuda a que el personaje adquiera un poco la simbología que tiene este animal como tal. Cuando abre todas sus plumas y enseña a todos su belleza, ese punto de ego que tiene el animal, Francisco también lo tiene. Es un poco el humanizar con este ejercito alado, que esta bajo las órdenes del este gran pavo, la representación de este muerto.

Como lectora, ¿cuáles autores y/o libros te gustan más?
Me gustan los libros que la final me dejan una reflexión, que me llevan a indagar. Me encanta la escuela rusa, que ha marcado en cuando a la descripción de los sentimientos, los escritores japoneses, una escuela de las sensaciones, dónde las atmósferas tenían un gran papel de seducción, y luego todos los escritores latinoamericanos, que los siento muy próximos a mí.

¿Le gustaría  ver llevada a la gran pantalla esta o cualquiera de sus novelas?
Yo creo que todas mis novelas son muy cinematográficas. Esta podría ser una obra de teatro muy interesante. Hay una magia que tiene la lectura que hace que el lector crea sus propias historias. Yo nunca describo minuciosamente a los personajes porque prefiero verlos desde los sentimientos.  Por ejemplo, a este Francisco Valiente el lector irá creándolo bajo la imagen que posean de un sinvergüenza. Es bonito que el lector se implique en lo que esta leyendo.

"...la literatura es libertad y la publicidad era prisión"

Dejó su carrera como publicista para dedicarse plenamente a ser una escritora y contadora de historias, ¿volverá a retomar su carrera?
No volvería jamás. Me ha costado mucho estar dónde quería estar. Para mí la literatura es libertad y la publicidad era prisión. 

¿Considera que se está menospreciando la cultura en nuestro país?
Bueno, ahora hay un tema grave, sobretodo con el teatro que con el recorte de presupuestos la cultura se ha visto muy afecta. Creo que el arte es  muy potente. El arte nace de la rebelión y creo que esto no se puede amordazar. Al final, el arte y los artistas, van a defenderlo como lo tienen que defender.

¿Un sinvergüenza de siete suelas que esté de plena actualidad?
(Risas) Hay muchos. Abría que abrir los diarios, que ahí se encuentran muchos que están pendientes de pagar sus penas (risas).

Y para terminar, ¿está pensando ya en su próxima novela?
Sí, tengo tres historias y habría que ver cual gana la carrera. Esto es como los espermatozoides como corren a fecundar el óvulo. El que llegue primero al óvulo, ese va a ser la primera novela.

Entrevista publicada en Cover Set